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De la conducta de cada uno depende el destino de todos. Nos sumamos al cambio por un planeta sano.
¿Sabías que dos tercios de nuestro planeta son mares y océanos?
Son la fuente de la vida y el gran regulador del clima en el planeta, las precipitaciones, el agua potable, el tiempo. De ellos provienen gran parte de nuestros alimentos y el oxígeno que respiramos cada día y necesitamos para vivir.
¿Te parecen razones suficientes para cuidarlos?
Pues no solo no los cuidamos, sino que 8 millones de toneladas de desechos terminan en nuestros mares y océanos cada año. Además de las 640 mil toneladas de redes de pesca que están abandonadas en sus fondos.
El aumento de las emisiones de CO₂, entre otros gases de efecto invernadero, han provocado un calentamiento global del planeta que los océanos están absorbiendo y en consecuencia se está acidificando, haciendo cada vez más incompatible la vida en ellos.
Como consecuencia de todo esto, y por efecto del cambio climático, se produce la subida del nivel del mar. Un ejemplo de esto es que el archipiélago de Kiribati está apunto de desaparecer. De hecho, se espera que sus islas sean sepultadas por el océano dentro de 10 o 15 años, dejando sin hogar a las más de 100.000 personas que hacen vida en ellas.
Desde Kiribati creemos que es la hora de reaccionar, de adoptar acciones positivas y de hacer frente a los problemas que le causamos al planeta. Y la mejor forma es sumar entre todos, unirnos de manera sostenible para causar el menor impacto al planeta.
Nos ha costado más de dos millones de años destruir la tierra. No tenemos tanto tiempo para curarla.
¿Por qué depende de nosotros?
Porque todos, con nuestras acciones o con nuestra forma de vivir, somos responsables de la situación del planeta. Si cambiamos nuestra forma de comprar por una forma más sostenible, seremos parte de la solución. Hay otras formas de vivir más respetuosas con nuestro entorno, con los mares y los océanos
Cuidamos el planeta
Ropa de baño 100% sostenible, ecológica y vegana
Kiribati apuesta para sus productos por materiales sostenibles. Desde el tejido de nuestros bañadores, pasando por el forro, el cordón y hasta las etiquetas, todos están fabricados con material orgánico, desechos o residuos.
Limpiamos los mares
Tejido respetuoso
Usamos ECONYL®, un material de gran calidad compuesto de basura pre y post consumer, como redes de pesca, pelusas de moquetas y plásticos industriales. Estos materiales se limpian para poder extraer nailon, recuperando su pureza natural y creando nuevos hilos de ECONYL® con la misma calidad que el nailon virgen, pero sin haber consumido materias primas fósiles no renovables. Éste material puede ser reutilizado una y otra vez, creándose nuevos productos sin tener que utilizar nuevos recursos
Reducimos el uso de recursos naturales
Ahorramos 40% de agua, 50% de energía y 60% en emisiones de CO2.
Todos nuestros bañadores están forrados en su interior de con poliamida proviene de una empresa española, también fabricado con plásticos reciclados sacados de las profundidades del mar y con materias primas que iban a ser desechadas. En el proceso de producción se ahorra un 40% de agua, un 50% de energía y un 60% en emisiones de CO2.
Slow fashion
Producción sostenible
Producimos de forma local, ahorrando en costes de transporte. Nuestros talleres de corte y confección están en Valencia, en pequeñas localidades muy cercanas a nuestras oficinas, por lo que reducimos los desplazamientos y, por tanto, las emisiones de CO2 en la fase de producción y transporte. De esta forma, también favorecemos el empleo local. Así, no sólo respetamos las prendas y el medio ambiente, sino también a las personas, apostando por un modelo productivo que respeta la dignidad y los derechos de los trabajadores, lo que revierte de forma positiva en la sociedad.
Huimos de la globalización y deslocalización productiva que tanta desigualdad social provoca.
Huimos, igualmente, del fast fashion, buscando revertir los hábitos de consumo que tanto dañan al planeta, y que genera patrones de consumo masivo e impulsivo.
Reducimos desechos
Embalaje respetuoso
Eliminamos el embalaje innecesario, reduciendo los desechos. El papel en el que envolvemos nuestros productos proviene de fuentes responsables con certificado FSC. Además, están libres de ácidos, y la tinta está hecha a base de soja. Para el envío, utilizamos sobres compostables, hechos de una combinación de PBAT, un polímero de base biológica compostable, y PLA, que está compuesto de materiales vegetales como maíz y paja de trigo, por lo que el impacto medioambiental es mínimo.
Somos slow fashion, ¡súmate!
Trabajamos con materiales de calidad, resistentes y duraderos, dando como resultado bañadores hasta dos veces más resistentes al cloro y a las cremas solares. Somos sostenibles no sólo en los tejidos, o en la producción, sino que además, nuestros bañadores tienen una vida útil mayor, fomentando el consumo responsable y de menor impacto para el planeta. A mayor vida útil, menor necesidad de consumo. Únete al Slow Fashion y forma parte de la solución
